Ayer, mientras por la radio emitían el Tamerlano del Teatro Real con el que Plácido Domingo se está cubriendo de gloria, por no decir otra cosa, agotado después de estar todo el día saturado por leer y escuchar referencias a su personal interpretación en diversos medios desde todos los puntos de vista pero sobre todo desde el peloteo más bochornoso (lamentable la entrevista que le hicieron en La Ventana de la SER), decidí escuchar algo de Haendel, el gran perdedor de todo este follón.Tenía dos opciones compradas recientemente y aún pendientes de escucha para elegir: Amadigi con López Banzo y Aci, Galatea e Polifemo, una cantata de la etapa italiana en la versión de Marco Vitale al frente del conjunto Contrasto Armonico, que fue la que elegí.
El disco está editado por Brilliant, lo cual quiere decir que el precio es bajísimo. Si ya he comentado un par de veces en el blog lo acertado de la política de precios de Naxos, cuánto mejor me parece la de Brilliant, que publica auténticas joyas a precios de risa. Recuerdo haber comprado la integral de sinfonías de Beethoven de este sello en una muy buena versión (Blomstedt / Staatskapelle Dresden) por poco más de diez euros. Si además de un buen precio nos ofrecen la oportunidad de escuchar a jóvenes artistas que seguramente nunca encontrarían la oportunidad de grabar en una gran compañía, mejor que mejor.El conjunto barroco Contrasto Armónico fue fundado en 2004, están empezando y a juzgar por lo escuchado tienen un futuro prometedor dentro del movimiento historicista. Su director, el clavecinista Marco Vitale, nació en 1980 (es más joven que yo, y eso debería estar prohibido). Si algo me sorprendió del disco fue la calidad del sonido orquestal, comparable al de formaciones más establecidas. En las voces, tres cantantes a los que no conocía de nada: Stefania True como Aci, Luciana Mancini como Galatea y Mitchell Sandler en el complicadísimo papel del cíclope Polifemo. Es destacable el desempeño del bajo, pues se enfrenta a un papel con una tesitura extensísima y en el que tiene que dar saltos hasta de dos octavas y media.
En resumen, un disco muy recomendable y a un precio de lo más asequible. Un Haendel joven interpretado por jóvenes y sobre todo una interpretación respetuosa con la figura (oronda) del sajón, algo que en momentos como estos es como un bálsamo para nuestros oídos.
Escuchemos dos piezas del disco, el duetto con el que empieza la obra, Sorge il dì, cantado por Aci y Galatea y la tremenda aria de Polifemo Fra l'ombre e gl'orrori, todo un tour de force para el bajo.
Pincha aquí prara escuchar 'Sorge il dì'
Pincha aquí para escuchar 'Fra l'ombre e gl'orrori'
11 comentarios:
Oye Titus, sólo una cosita en son de paz... ¿y si no es peloteo sino que a quienes lo entrevistaron o glosaron su actuación les gusta? Digo... porque aunque no lo creas hay mucha gente que admira (admiramos) a Plácido sinceramente. ¿Qué crees que le diría yo si tuviera un programa de radio y la oportunidad de entrevistarlo? Y te aseguro que no me movería peloteo ni interés alguno sino la admiración más sincera. En una cosa nos parecemos: te cuesta tanto comprender a sus admiradores como a mí el encono con que algunos hablais de él a veces.
Dicho lo cual, me compraré el disco que nos recomiendas, para ayudar a reponerse al maltrecho y desdichado Händel ;-)
Un beso
Si le hubiesen dicho que tiene una gran carrera, que es una leyenda viva de la ópera, etc, etc, vale, de acuerdo. Pero si le dicen, como le dijeron, que el barroco mejora mucho cuando lo canta él, que hay que ver lo bien que lo hace, que antes de que llegase él la música de Haendel estaba desangelada y ahora por fin se revela cómo debe ser interpretada con sentimiento, pues eso es peloteo, más que nada porque es mentira. Entiendo que no quieran criticarle, pero de ahí a presentarlo como el nuevo mesías del canto barroco va un trecho.
Pues a mí no me han gustado mucho esas interpretaciones, sobre todo las de ellas, respecto al bajo, es tan difícil encontrar bajos y barítonos que le hagan justicia a Haendel, Terfel, que no se prodiga mucho en este tipo de repertorio, y Ramey, que llegó tade.
Quiero decir, llegó demasiado pronto.
Las voces, efectivamente, sin estar mal no están al nivel de los instrumentistas. Ellas mejoran en sus intervenciones posteriores y él mantiene un nivel que, sin ser sobresaliente y teniendo en cuenta los escollos de la partitura es más que aceptable. Tengamos en cuenta que son cantantes casi desconocidos (de hecho, entre los méritos del bajo se cita haber hecho de diputado flamenco en un Don Carlo en Holanda, ya me dirás qué mérito es ese).
Ese Amadigi se merece un buen post con enlaces incluídos ¿no Titus?
Tuve la suerte de asistir hace un par de años a un ensayo público de la proyectada grabación, precisamente en el Festival de Lugo que comentamos. Un éxito y un gran nivel, supongo que bien pulidito...
Yo pongo los enlaces:
Amadigi aquí
Acis y Galatea, la dieron en Castellón hace ya basatnes años a cargo de un grupo inglés creo recordar, muy historicistas ellos vestidos con pelucas y todo los músicos. A mi me sonó bastante tostón.
En cuanto al Tamerlano veo que mi reino sigue sin ser de este mundo, caro Imperator, pues a mi no solo me gustó Plácido sino tambien el resto del reparto, como a la mayoria del publico del Real. Por cierto la semana pasada estuve en la Tabernera del Puerto que dieron en el Principal y me sorprendió muy gratamente el bajo Ivan Garciá y el baritono Andrés del Pino. El resto, pasables.
Supongo que tras el anonimato se oculta Publio, prefecto de mi guardia pretoriana, ¿no es cierto? Bueno, hay opiniones para todos los gustos, pero la tuya es la primera que leo que está de acuerdo tanto con Domingo como con el resto del reparto. Mejor para ti, desde luego. Cambiando de tema, te anuncio que compré recientemente el disco "Canciones de otra orilla" en el que Isabel Monar canta a Matilde Salvador y pensaba dedicarle una entrada en breve. Ya te avisaré cuando lo haga, que te gustará.
En efecto me oculto porque he sido desterrado por algun pecado inconfesable y el blogg no reconoce mi santo y seña.
Agradecido, maac
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