miércoles, 28 de enero de 2009

Henri Dutilleux: Sonata para piano

Henri Dutilleux (Angers, Francia, 1916) es uno de los compositores contemporáneos más importantes, a pesar de tener una producción de apenas treinta obras. Sus influencias hay que buscarlas en los autores franceses de principios de siglo, Debussy, Ravel y Roussel, así como en Stravinski, aunque si por algo destaca la obra de Dutilleux es por su originalidad.

La primera pieza de Dutilleux que se estrenó en público, tras una serie de composiciones destinadas a concursos y a pruebas en el conservatorio, fue Sarabande et Cortège para fagot y piano. Dicha obra se interpretó por primera vez en París en 1941, en plena II Guerra Mundial. Durante los años de la guerra también estrenó Cuatro melodías para canto y piano, la Sonatina para flauta y La Gèole para voces y orquesta. Sin embargo, no fue hasta 1946, con la guerra acabada y tras su matrimonio con la célebre pianista Geneviève Joy, que Dutilleux no empieza a componer la primera pieza que considera digna, repudiando así todas las compuestas anteriormente. Esta pieza es la Sonata para piano, una obra donde el autor agota las capacidades tímbricas del instrumento y que introduce dos características que se repetirán en sus creaciones posteriores: la técnica de la variación y el gusto por las atmósferas oníricas. La composición de esta pieza, dedicada a su esposa, al igual que toda la obra pianística que escribiría posteriormente, le llevó dos años.

Escuchemos el tercer movimiento de la Sonata para piano de Henri Dutilleux, Chorale et Variations, interpretado por Thomas Yu (quien, por cierto, se considera un pianista amateur a pesar de realizar giras de conciertos, pues su auténtica profesión es la de dentista).


Vídeo de thy306

4 comentarios:

carles p dijo...

Coincido contigo en la apreciación sobre Dutilleux. Aunque haya sido en cierta manera un compositor al que no se le ha tenido demasiado en consideración hasta avanzada edad, el hecho es que hasta el hipercrítico Boulez lo haya respetado (Messiaen lo veia con algo más de recelo, al menos en la época de su sonata para piano, pues no entendía que un compositor 8 años más joven que él escribiera en un estilo menos avanzado).
Existe también una influencia -yo creo que es bastante obvia- aunque nunca la he visto descrita en ningún lugar. Se trata de ciertos aspectos armónicos del Honegger maduro (especialmente el de las sinfonías)que anuncian mucho el gusto por las atmósferas oníricas que como bien dices, configura una parte importante de la música de Dutilleux. En fin, no me enrollo más. Vale más escuchar al esforzado dentista.

Un saludo,

Carles

Titus dijo...

Bienvenido Carles y gracias por tu ilustrativo comentario. No había pensado lo de Honegger, quizá porque lo tengo muy poco escuchado. De hecho, ya pensé que quizá decir que tenía influencia de Stravinski podría parecer arriesgado, aunque yo creo que dicha influencia sí existe. lo dicho, gracias y espero sguir contando con tus comentarios. Saludos.

Barbebleue dijo...

Realmente la obra es un viaje de investigación a través de TODO el instrumento.

Dutilleux es un compositor muy personal, sin escuela. Muy minucioso y perfeccinista, transpira el percusionista que es.

Otra influencia que le he leído, es la de Proust y su "visión" del tiempo. Interesante...

Gracias, Titus, me ha gustado mucho.

Titus dijo...

Pues sí, muy interesante ese salto de lo narrativo a lo musical. Gracias por la información Bbb.